Tipos de telescopios

 


Lo primero es conocer su definición según la Real Academia Española. Telescopio: Instrumento que permite ver agrandada una imagen de un objeto lejano.

Es un instrumento óptico que recoge cierta cantidad de luz para concentrarla en un punto determinado.

Para poder ver las imágenes, se usan los oculares, los cuales proporcionan los diferentes aumentos al telescopio.

Éste, permite que el ojo aprecie todos los detalles contenidos en la imagen que se forma en el objetivo.

Los telescopios astronómicos son los instrumentos más importantes para observar el cielo, sin dar de lado a los prismáticos.

Están constituidos esencialmente por dos partes: el tubo y la montura.

A su vez, el tubo, está formado por objetivo y ocular.

El objetivo es el que se orienta hacia el cielo.

La montura, aparte de sostener el tubo, hace posible los movimientos suaves y precisos para orientar el telescopio.

Por ello, una buena montura, puede costar más que el tubo.

Para poder elegir un telescopio hay que tener en cuenta varios aspectos, entre ellos, precio, si tenemos previsto cambiar de equipo pronto, lugar en casa donde colocarlo, si las observaciones van a hacerse en un ámbito rural o de ciudad, si es una posible afición pasajera…

Por desgracia no existe el telescopio ideal, ya que cada uno tiene su función. Ejemplo: Para tener una imagen muy estable, el indicado es un refractor, uno muy manejable en cuanto al transporte (cosa muy importante a tener en cuenta), el mejor es un reflector, para tener las ventajas de ambos, podemos escoger el catadióptrico, el problema de este tipo de telescopio es su elevado coste.

 

Existen 3 tipos de telescopios: refractores (objetivo de lentes), reflectores (con objetivo de espejos) y catadióptricos (mixtos).


Refractores



Se denominan así, porque la formación de la imagen se basa en la desviación que sufren los rayos de luz cuando atraviesan las lentes, es lo que se conoce como refracción.

Ventajas en cuanto a otros tipos de telescopios: la mayor nitidez y contraste en las imágenes.

Muy poco mantenimiento, estupendo para observar la Luna y Planetas, no se descolima (no se desalinean las lentes debido al movimiento al transportarlo).

Desventaja: aberración cromática, se entiende como el efecto que se produce de los bordes coloreados alrededor de un objeto visto a través de una lente, causado porque la lente no desvía todos los colores al mismo foco, precio frente a los reflectores, no es muy apropiado para objetos de cielo profundo (nebulosas, cúmulos…),

Los objetivos de dos lentes, se denominan acromáticos y, los de tres son apocromáticos o al flúor.


Reflectores



El ocular se coloca en un lateral del tubo, éste, recibe la luz del espejo secundario.

Ventajas: prácticamente sin aberración cromática, muy apropiado para objetos de cielo profundo.

Desventajas: Suelen requerir que se les colime (alinear espejos), son más frágiles que los refractores o catadióptricos.


Catadióptricos



Ventajas: Prácticamente no necesita mantenimiento, tubo cerrado, eso lo hace más ventajoso que los reflectores (tienen el tubo abierto) ya que no les entra la suciedad.

Desventajas: A la misma apertura es más caro, algo de pérdida de luz debido a que el espejo secundario está un poco obstruido.

 En este tipo de telescopios, la luz pasa a traves de una placa correctora  y es reflejada por un espejo (primario) hacia un espejo en forma de menisco (secundario) que la devuelve hacia la parte trasera donde se encuentra el ocular . 

Cuando hablamos de abertura, nos referimos a la capacidad de captación de luz del telescopio. Uno de 4 pulgadas, capta 16 veces más luz que uno de 1 pulgada, puesto que tiene 16 veces dicha superficie , con ello se consigue captar objetos más débiles.

El aumento de un telescopio no es lo principal, ya que es algo que se puede variar con los distintos oculares.

Cada telescopio tiene un límite de aumento, el cual se calcula multiplicando por 2 el diámetro en milímetros del objetivo. Por ejemplo, un telescopio de 90 mm, proporciona un máximo de 180 aumentos.

Los aumentos que proporciona un telescopio se obtienen, dividiendo la distancia focal del objetivo entre la distancia focal del ocular. Ejemplo: un objetivo de 900 mm con un ocular de 4 mm, nos da un aumento de 225x.

A igualdad de abertura, un telescopio de distancia focal corta es más luminoso que uno de distancia focal larga.

La relación focal se obtiene dividiendo la distancia focal entre el diámetro del objetivo. Ejemplo: DF 800/D 200=4 (f/4). Este sería un telescopio muy luminoso, lo cual lo hace muy adecuado para observar cielo profundo.

 


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